Como dijera un viejo amigo, allá por el 90:
Pensamientos pesados esta noche.
No son de Blanca Nieves.
Sueños de guerra, de mentiras,
de fuego de Dragones,
y de cosas que muerden.
A lo que le contesté, ahí mismo, ahí no más:
Tranquilo nene, no hablés más.
No te preocupes por esos ruidos.
Es el mostro abajo de la cama,
en tu armario, en tu cabeza.
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PD: Dejensen de joder, yo no se qué es eso del thrash o el metal ese que andan diciendo por ahí. Yo escucho folklore de la Negra Sosa y del Chaqueño Palavecino.
Esto lo dijo mi amigo Jaime en pedo con una guitarra en la mano.
2 comentarios:
Mati, nada que ver con nada! Pasaba a recomendarte: SANTA CLAUS CONQUERS THE MARTIANS! -una de las PEORES películas de la historia del cine, según "especialistas"-
Y no dejés de ver TETSUO I: THE IRON MAN (y si te la aguantai, mirá la II), te lo voy a seguir ripitiendo hasta la muerte!
Saludos!!
Los dragones perdidos en ese laberinto interno... Dragones que no existen, pero a los cuales tememos encontrar en nuestros momentos de letargo, cuando bajamos las guardias. Por eso estamos siempre expectantes, llorando, temiendo.
Hasta que desaparece el ruido, se diluye.
Gente en pedo con guitarras en la mano... son momentos gloriosos.
:)
Monse.-
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